Para este ambicioso proyecto cuya ubicación en una elevada altitud fue elegida cuidadosamente, los equipos de Richel supieron diferenciarse y proponer a nuestro cliente una solución técnica que permitiera a la vez ahorrar energía gracias a la doble pared inflable y aprovechar al máximo el sol con 2 films con un 92 % de transmisión, es decir, un 84 % en total. Para adaptarse a las necesidades específicas del cultivo de rosas, se instalaron 10 canalones de cultivo sobre soporte de acero para un control óptimo del drenaje y una densidad de 7,5 plantas por metro cuadrado.

Este proyecto demostró rápidamente su rendimiento, ya que, 18 meses más tarde, avalado de nuevo por su socio financiero ACBA Leasing, Rosefield firmaba la ampliación prevista de 2,5 hectáreas.